Guía rápida sobre la afasia: ¿Cómo proceder cuando una persona pierde su capacidad comunicativa tras un daño cerebral?

¿Qué es la afasia?

El DSM-V, como se le denomina al manual de diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales de la Asociación Americana de Psiquiatría, define la afasia como “una disfunción del lenguaje que puede involucrar una alteración de la comprensión o de la expresión de las palabras o equivalentes no verbales de palabras (gestos, expresiones faciales…) derivada de un problema  en los centros del lenguaje de la corteza cerebral, los ganglios basales, o en las vías de la sustancia blanca que los conectan”.

La afasia implica una serie de cambios en la forma de vida de la persona que la padece. Además, la pérdida total o parcial de la habilidad para comunicarse no solamente afecta al paciente sino a su entorno familiar y social, por lo que, en muchos casos, el paciente es incapaz de continuar realizando su actividad laboral, teniendo implicaciones psicológicas, económicas y sociales.

En España hay más de 350.000 personas que padecen afasia y cada año se diagnostican alrededor de 25.000 nuevos casos, según datos dela Sociedad Española de Neurología.

¿Qué signos nos alertan de padecer Afasia?

La afasia es un trastorno que se presenta generalmente de forma repentina tras un accidente cerebrovascular (ACV o ICTUS) o un traumatismo craneoencefálico (TCE). Determinadas infecciones, como la producida por la encefalitis, también pueden derivar en afasia. Asimismo, los signos de esta disfunción puede aparecer de forma gradual debido a un proceso de desarrollo lento, como un tumor cerebral o una enfermedad neurodegenerativa (en el caso de la afasia progresiva primaria).

Los síntomas afásicos que pueden alertar sobre un posible accidente cerebrovascular o enfermedad neurodegenerativa en progreso son:

  • Expresarse con oraciones sin sentido.
  • Tener muchas dificultades para nombrar las cosas o acciones (anomia).
  • Decir palabras que no existen.
  • Hablar con frases cortas o incompletas, de forma poco fluida.
  • No comprender conversaciones o interacciones comunicativas.
  • Pensar que hablamos bien pero nuestro interlocutor no nos comprende.
  • Sustituir unos sonidos por otros dentro de las palabras.
  • No poder dejar de decir la misma palabra una y otra vez.

Hay muchos tipos de afasia. Su clasificación se basa en el  grado de afectación que tiene el paciente sobre la expresión, la comprensión, la repetición, la lectura y la escritura (Afasia de Broca, Afasia transcortical motora, Afasia de Wernicke, Afasia de Conducción, Afasia Transcortical Mixta, Afasia Transcortical Sensorial, Afasia Global).

¿De qué forma puede prevenirse la Afasia?

La afasia no es una enfermedad en sí misma, sino  un trastorno del lenguaje y la comunicación consecuencia de un daño cerebral, lo que implica que no hay forma de prevenir su aparición. No obstante, si podemos atender a los consejos generales para disminuir el riesgo de padecer un accidente cerebrovascular (ACV), que son los siguiente:

  • Realizar ejercicio físico moderado con regularidad.
  • Conocer las señales de alarma, como son alteración en la movilidad, vértigo, alteraciones visuales, dolor de cabeza súbito y de intensidad inusual, confusión, dificultad para hablar.
  • Aumentar la reserva cognitiva.
  • Reducir el estrés.
  • Mantener un peso saludable.
  • No fumar.
  • Controlar el consumo de azúcar.
  • Controlar los niveles de colesterol y tensión arterial.

Tratamiento de las Afasias

Para conseguir un tratamiento adecuado, es fundamental una evaluación exhaustiva y especializada de paciente que permita crear un programa de intervención específico centrado en las necesidades de cada persona.

Es primordial que la terapia del habla y del lenguaje se realice siempre a través de la figura del  logopeda. El objetivo de esta terapia será mejorar la capacidad de comunicación, recuperar la mayor parte del lenguaje posible y, a la vez, enseñar la forma de compensar las habilidades del lenguaje perdidas mediante otros métodos que permitan al paciente comunicarse.

En el tratamiento de las personas con afasia es fundamental la implicación de los interlocutores más habituales del paciente, como sus familiares y amigos.

Algunos de los objetivos principales de tratamiento logopédico en las afasias serían:

  • Mejorar sus habilidades comunicativas.
  • Mejorar la comprensión y a usar las palabras correctamente.
  • Ayudar a comprender preguntas acerca de algo que hayan leído o escuchado.
  • Recuperación del nombre de objetos, personas, lugares…
  • Mejorar la participación en conversaciones.
  • Potenciar cualquier modo de comunicación, para apoyar, facilitar y compensar las alteraciones del lenguaje.
  • Ayudar a que el paciente use sus nuevas habilidades de comunicación en su día a día.
  • Ayudar a los familiares y amigos a modificar sus hábitos de comunicación y enseñándoles nuevas estrategias.

En muchos casos se necesitará un equipo interdisciplinar (neurología, neurpsicología, fisioterapia, terapia ocupacional, trabajo social, etc..) que junto con el logopeda ayude a mejorar las secuelas que pueden aparecer tras el daño cerebral.

Consejos para comunicarse con una persona con afasia

Comunicarse con una persona con afasia puede ser una tarea compleja, tanto para el paciente como para su interlocutor. Sin embargo, la aplicación de unas sencilla estrategias favorecerán notablemente el diálogo:

  • Hable con un volumen de voz normal, la persona con afasia no tiene por qué sufrir de problemas de audición y puede molestarle que le griten.
  • Intente realizar una comunicación sencilla pero no infantil. Hable como la haría con una persona adulta, no le trate como a un niño.
  • Antes de iniciar la conversación asegúrese que tiene su atención.
  • Intente disminuir, lo que sea posible, el ruido de fondo (televisión, radio, varias conversaciones simultáneas).
  • Puede utilizar gestos y ayudas visuales.
  • Sea paciente y de tiempo a la persona con afasia para comprender y responder.
  • No hable por la persona con afasia, al menos que esta se lo pida.
  • Fomente e integre los recursos comunicativos que posee la persona con afasia (comunicadores, gestos, etc).
Cristina Arias Calderón

Ana García Bares

Patricia Ontiveros Fdz de Retana

Cristina de la Orden Acevedo

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